31 de octubre de 2017
Ambrose Spreafico - Heiner Bludau
El texto completo de la Declaración Conjunta de la Conferencia Episcopal Italiana y la Iglesia Evangélica Luterana en Italia para el 500 aniversario del comienzo de la Reforma

Publicamos el texto completo de la Declaración Conjunta de la Conferencia Episcopal Italiana y de la Iglesia Evangélica Luterana en Italia para el 500 ° aniversario del comienzo de la Reforma. "Conciliar para anunciar el Evangelio", este es el título del documento que lleva la firma de Mgr. Ambrose Spreafico, presidente de la Comisión Episcopal para el Ecumenismo y el Diálogo Interreligioso de CEI, y Shepherd Heiner Bludau, decano de la Iglesia Evangélica Luterana en Italia. "A principios de octubre, Bludau y Don Cristiano Bettega, director de la Oficina Cei para el Ecumenismo y el Diálogo Interreligioso, hablaron en una breve pero significativa conferencia en Trento, en la Oficina Cei para el Ecumenismo y el diálogo es la relación y también ha visto la Iglesia Evangélica Luterana en Italia y la Oficina Nacional para el Ecumenismo y el Diálogo Interreligioso en el CEI. Al final de esa conferencia, pensamos en esta declaración común. Es un compromiso común tomar en serio lo que hemos dicho y escrito repetidamente en el aniversario de este año: que el camino ecuménico se trata de nosotros y que todos nos comprometemos con el hecho de que la pasión ecuménica es, finalmente, la pasión por el Evangelio de Jesús Cristo, por su Iglesia, por las mujeres y los hombres de hoy. Es una declaración que involucra a todos, no solo a los católicos y luteranos: porque el camino del conocimiento mutuo, la aceptación, la colaboración y el testimonio del Evangelio es algo de todos nosotros ". Aquí está el texto de la declaración:
"Más que los conflictos del pasado, el regalo divino de la unidad entre nosotros guiará nuestra colaboración y profundizará nuestra solidaridad. Al encogernos en la fe en Cristo, orar juntos, escucharnos unos a otros, vivir el amor de Cristo en nuestras relaciones, nosotros, católicos y luteranos, nos abrimos al poder de Dios, Uno y el Trono. Enraizándonos en Cristo y haciéndolo testificar, renovamos nuestra determinación de ser leales al amor infinito de Dios por toda la humanidad "( Declaración conjunta sobre la Conmemoración Católica Luterana de la Reforma , Lund, 31 de octubre de 2016). Estas palabras condujeron el camino de la reconciliación y el intercambio que involucró a católicos y luteranos en muchos lugares este año para experimentar la conmemoración del 500 ° aniversario del comienzo de la Reforma en la línea citada por el documento Dal. conflicto con la Comunión de la Iglesia Luterana Católica por la Unidad.
En Italia ha habido numerosas iniciativas en varios niveles, que involucran a cristianos y cristianos que conmemoran la Reforma del siglo XVI en un espíritu que, si no puede considerarse una novedad a la luz de los pasos dados en las últimas décadas, seguramente Abrió una nueva temporada en el camino hacia la construcción de la unidad visible de la Iglesia con la que terminar el escándalo de las divisiones.
Precisamente a la luz de estas iniciativas, los católicos y los luteranos esperan que sea posible continuar profundizando en el conocimiento de la obra de Martín Lutero y suponer una mejor comprensión de las riquezas espirituales, teológicas y litúrgicas del siglo XVI para una reforma de la Iglesia arraigada en las Sagradas Escrituras y enriquecido por la tradición de los concilios ecuménicos, capaz de eliminar los prejuicios que aún impiden una lectura compartida de los acontecimientos históricos de la Reforma en todas sus articulaciones.
En la lectura conjunta de las Escrituras, que ha sido un paso fundamental en el descubrimiento diario de lo que une a cristianos, católicos y luteranos, invita a nuevas fuentes para desarrollar el camino ecuménico, también gracias a una relación renovada con el pueblo judío comenzando con la raíz bíblica común. Leer juntos las Sagradas Escrituras ilumina la experiencia de la fe con sendas ecuménicas de escucha y comentarios de la Palabra de Dios para compartir tradiciones exegéticas y formulaciones doctrinales, confiando al Señor los tiempos y formas de realizar la unidad visible de la Iglesia.
Los católicos y luteranos creen que estos caminos deben ser apoyados y alentados con la perspectiva de fomentar un replanteamiento de la catequesis ecuménica, especialmente en relación con la celebración del bautismo y el matrimonio y, más en general, las liturgias de reconciliación ecuménica para ayudar a vivir estos momentos de la vida de las comunidades locales como una oportunidad para reafirmar que para los católicos y luteranos el ecumenismo es una elección irreversible, diaria y no urgente que puede ayudar a comprender mejor sus identidades, haciendo que la misión de la Iglesia sea más animada y gratificante. Los católicos y luteranos quieren hacer su compromiso de cuidar cada vez más dinámico, proponiendo un modelo de desarrollo económico que no está interesado en la lógica del beneficio, que ha hecho tanto daño en nuestro país con la contaminación del aire, el agua y de la tierra, pero superando los intereses individuales o grupales, saben cómo utilizar los recursos de la creación con respecto al medio ambiente y siempre buscando el bien común y lo mismo de la tierra que somos guardianes y no maestros.
Para los católicos y los luteranos, las peculiaridades del camino ecuménico deben conducir a multiplicar las oportunidades para presenciar la amistad y ayudar a los pobres, especialmente hoy, a los migrantes que huyen de las guerras y los desastres naturales. Frente a su necesidad e incluso a un número creciente de nuestros conciudadanos, nos comprometemos a involucrar a nuestras comunidades en un mayor esfuerzo de solidaridad, siempre teniendo al Buen Samaritano, el Jesús que está empeñado en las heridas de la humanidad que sufre. Estamos dispuestos a cooperar con todos nuestros hermanos y hermanas que comparten nuestra fe en el Señor Jesús, y también con mujeres y hombres de otras religiones y con todos aquellos que se preocupan por el futuro de nuestro país y el mundo.
Fortalecer la amistad en la fraternidad, al pie de la cruz de Cristo, nos ayudará a reconciliar recuerdos que puedan apoyar a católicos y luteranos en la proclamación y el testimonio de la Palabra de Dios en la sociedad contemporánea, para promover cada vez más la reforma evangélica de la vida cotidiana de las comunidades locales.
Obispo Ambrogio Spreafico,
Presidente de la Comisión Episcopal para el Ecumenismo y el Diálogo Interreligioso de la Conferencia Episcopal Italiana
Shepherd Heiner Bludau,
Diácono de la Iglesia Evangélica Luterana en Italia
Roma, 31 de octubre de 2017, en el quinto centenario del comienzo de la Reforma de Martín Lutero.

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